La Autoestima es el concepto que tenemos de nuestra valía, y esta se basa en todos los pensamientos, sentimientos, sensaciones y experiencias que hemos ido recogiendo a lo largo de nuestra vida, las cuales nos van dejando huella.
La autoestima proviene de dos fuentes: Es la forma en que me valoro y la forma en que mi familia y los demás me valoran.
Una buena Autoestima nos permite crecer, ser libres, creativos, alegres, amistosos, sentirnos plenos y con capacidad de dar y recibir.
El ser humano para desarrollarse necesita amarse a si mismo y saberse amado por los que le rodean, la propia valoración es el comienzo para valorar a los demás.
La Docena Mágica de la Autoestima
- Saber y aceptar que todos tenemos cualidades y defectos.
- Saber que todos tenemos algo bueno, de lo cual podemos estar orgullosos.
- Poder liberarnos de conceptos negativos de nosotros mismos.
- Aceptar que todos somos importantes.
- Vivir responsablemente de acuerdo con la realidad, conociendo lo que nos gusta y lo que nos disgusta.
- Aprender a aceptarnos, a través de lo que sentimos y de lo que somos.
- Liberarnos de la culpa al evaluar lo que queremos y lo que pensamos.
- Actuar de acuerdo a lo que decimos.
- Sentirnos responsables de nosotros mismos, ya que al hacernos responsables de la propia existencia genera confianza en nosotros mismos y en los demás.
- Vivir autenticamente al aprender a ser congruentes entre la forma de sentir y de actuar.
- Fomentar la autoestima en los otros, ya que al fomentar la autoestima de las personas que nos rodean reflejan nuestra propia autoestima.
- Hallar la valentía de amarnos como personas y comprender que ese es un derecho propio que todos tenemos.
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